Los motivos son, como el propio presidente de Aerocas, Carlos Fabra, explicaba que «el aeropuerto ya es conocido hasta en China». Otro asunto es la imagen que desde fuera se tiene de la base de Vilanova de Alcolea que se ha convertido en un chiste recurrente y uno de los elementos más famosos de la provincia.

De ahí que una vez más no esté el aeropuerto por la «mala imagen» que ofrece de la provincia, tal y como explicaban fuentes del PP. Ya el año pasado el aeropuerto quedó excluido de la oferta turística de Fitur -en pleno auge de chanza sobre la base- por decisión del presidente de la Diputación, Javier Moliner, y tras más de una década en la que el proyecto tenía un expositor propio en la feria.

La fama del aeropuerto es algo inparable y cualquier novedad sobre la base es recogida por todos los medios de comunicación nacionales e internacionales, lo que ha elevado su proyección, pero siempre con una visión negativa: la de un aeropuerto inaugurado hace más de un año y en el que no aterrizan aviones.

Ante esta situación, el presidente de la Diputación y la propia Conselleria de Turismo han decidido guardar silencio sobre el proyecto, conscientes de lo que significa. Mientras tanto, Carlos Fabra ofrece a veces novedades al ser el principal valedor de la base.

Ayer, tras el anuncio realizado por el diputado de Turismo, Andrés Martínez, y el de Turismo de Interior, José Pons, sobre este hecho, el propio Carlos Fabra daba su opinión. A juicio del secretario general de la Cámara de Comercio, estas restricciones «no llevarán a conseguir éxitos económicos futuros», por lo que cree que es un «grave» error para el sector turístico que la provincia de Castellón no tenga un ‘stand’ propio en Fitur, pese a que sí dispondrá de un espacio diferenciado, en lugar de la gran cantidad de mostradores que ofrecía bajo su mandato. «El turismo es y será el principal referente económico no solamente para España, en cuanto a su aportación al PIB, sino que debe de serlo para la provincia, ya que es una de las salidas económicas importantes que esta provincia tiene en un futuro», ha añadido.

La nueva edición de Fitur se celebrará en Madrid del 30 de enero al 3 de febrero y es históricamente el evento más importante para atraer visitas a la provincia de Castellón. Ahora, tal y como desvelaba Martínez, en lugar de promocionar con expositores los distintos municipios de la provincia, se apuesta por ofrecer productos. Así las cosas se prevé ofertar ‘paquetes’ de productos: el sol y playa, el turismo de interior, salud, familiar, festivales, deportivo y golf.

Justamente el turismo deportivo es una de las apuestas más importantes de la Diputación de Castellón para esta legislatura ya que, tal y como señalaba Moliner, se sustituyó el Master de Golf por distintos eventos deportivos «con los que llenar plazas de hoteles».

Con estas medidas, la Diputación pretende rebajar a la mitad el gasto que supone asistir a la feria de Madrid. En concreto, si el año pasado se invirtieron cerca de 140.000 euros, en esta ocasión se prevé destinar 70.000 euros. Se trata de una forma con la que racionalizar el gasto y evitar que algunos municipios -sin apenas proyección turística- asistan al evento y, en su lugar, se apueste por reforzar la presencia de los empresarios turísticos en Madrid.

De esta forma, en la reunión de ayer se acordaba que en la próxima edición de Fitur, la provincia de Castellón pasará de comercializar por municipio a comercializar por producto turístico para poder llegar a los clientes finales (touroperadores) de forma eficiente y no vender pueblos aislados.