Después de tres días de pausa, en los que, según el Instituto Geográfico Nacional y el Institut Geològic de Catalunya, no hubo actividad sísmica relevante frente a las costas de Castellón y Tarragona, este domingo volvieron a registrarse varios seísmos de cerca 3 grados en la escala de Richter.

El primero se produjo sobre las siete de la mañana, un una magnitud de 2,8, tal y como detalló el Institut Geològic de Catalunya. Por la tarde, a las 18.36 horas, este mismo organismo registró otro movimiento en la misma zona, en el entorno del almacén subterráneo de gas del Castor. En concreto, los sismógrafos detectaron un pequeño terremoto de 2,9 grados.

La actividad sísmica volvió a aparecer ayer domingo, después que el último movimiento del que se dio noticia se había producido el día 26 por la tarde. Además de los dos seísmos de casi tres grados detectados por el instituto catalán, el Instituto Geográfico Nacional contabilizó más de una treintena de leves movimientos, varios de ellos también superando los 2 grados, desde la madrugada del domingo hasta anoche.

Desde el pasado 9 de septiembre, se están registrando estos temblores sin tener constancia de haber sido percibidos en la costa, salvo el de mayor registro, 3,6 grados en la madrugada del día 24, ya que varios vecinos de Vinaròs residentes en edificios altos aseguraron haber notado algo.

Cabe recordar que la inyección de gas en la plataforma del Castor, a la que se vinculan estos seísmos, se detuvo, como ya estaba previsto anteriormente, el pasado día 16. A pesar de esto, 13 días después de detener la inyección, sigue habiendo actividad sísmica. En estos momentos, el Ministerio de Industria no permite reanudar la inyección, hasta que no se haga un estudio sobre la actividad sísmica de la zona.

Reunión

Por otro lado, los Ayuntamientos de Vinaròs, Benicarló y Peñíscola están emplazados el próximo día 10 de octubre a una reunión liderada por la Diputación de Castellón, en la que también están convocadas la empresa promotora del proyecto Castor y la Conselleria de Medio Ambiente. En esta reunión se abordará la problemática surgida con los movimientos sísmicos en la zona y se analizará la idoneidad de encargar nuevos estudios sobre la vinculación entre la inyección de gas en el almacén marino y los microseísmos.