La propuesta, presentada por ungrupo empresarial el 31 de diciembre, tiene «grandes proyectos» para el aeródromo y «la economía de la provincia de Castellón», ha dicho Carlos Fabra
La sociedad pública Aerocas estudia una oferta de compra del aeropuerto de Castellón por parte de un grupo empresarial de capital riesgo por unos 200 millones de euros, según ha anunciado hoy el conseller de Economía, Industria, Turismo y Empleo, Máximo Buch. La voluntad del grupo empresarial es que la infraestructura aeroportuaria, inaugurada oficialmente en marzo de 2011 y aún sin tráfico aéreo, esté operativa antes del 30 de junio de 2013.Buch ha hecho estas declaraciones en la Cámara de Comercio de Castellón tras reunirse con el presidente de Aerocas y secretario general de la institución cameral, Carlos Fabra, para tratar sobre la gestión de la infraestructura.
Carlos Fabra ha comunicado al conseller que Aerocas -participada mayoritariamente por la Generalitat- ha recibido una oferta de compra un grupo empresarial, cuyo nombre no ha querido revelar. El presidente de Aerocas ha afirmado que se está estudiando su propuesta y cuando tengan una respuesta la darán a conocer.
Asimismo ha entregado una copia de la propuesta al conseller Buch, la cual, ha afirmado Carlos Fabra, ya había sido comunicada al president de la Generalitat, Alberto Fabra. En esa propuesta, el grupo empresarial tiene «grandes proyectos para el aeropuerto y para la economía de la provincia de Castellón», ha dicho el expresidente de la Diputación.
La oferta económica se realizó el pasado 31 de diciembre, dos días después de que venciera el plazo dado por Carlos Fabra para que el aeropuerto saliera a la venta si no se alcanzaba un acuerdo con la antigua concesionaria de la infraestructura, con quien la Generalitat mantiene un conflicto por la ruptura del contrato.
Esa oferta contempla la compra de la infraestructura y diversas inversiones en la zona industrial y franca, por valor de unos 200 millones de euros.
Según Carlos Fabra, esto podría suponer «la creación de 1.200 o 1.400 puestos de trabajo nuevos directos e indirectos» y podría venir además, con una «alguna aerolínea debajo del brazo».
Buch ha añadido que la oferta procede del sector del capital riesgo y ha señalado: «Decimos que las operaciones duran lo que dura un embarazo: nueve meses».
El conseller ha asegurado que estas operaciones «llevan su tiempo» y «están sujetas a un acuerdo de confidencialidad», por lo que dicho que no puede «explicar más».
En cualquier caso, el conseller ha valorado que haya una oferta y ha felicitado a Carlos Fabra por el trabajo realizado.
En la oferta hay unas cuestiones previas sin demasiada trascendencia que deberían resolverse antes con «cierta rapidez», según Fabra.
Previamente a esta reunión y en declaraciones a los medios en el CdT del Grao de Castellón, el conseller había reconocido que la forma «más fácil» para la gestión del aeropuerto era su venta.
Por ello, posteriormente ha reconocido que ha recibido «con satisfacción» la oferta que le ha presentado Carlos Fabra.
Carlos Fabra se ha referido a «los agoreros que están en contra del aeropuerto y en Les Corts no tienen otra finalidad que hablar de la infraestructura», y les ha dicho que «si el aeropuerto está operativo la economía de la provincia será mucho mejor para todos; incluso para ellos, que no se lo merecen».
También ha señalado que Aerocas «no desaparecerá» y la Generalitat «estará vinculada al aeropuerto como lo está al del Altet, al de Valencia y a los puertos de la Comunitat Valenciana , porque es su obligación de tutoría y vigilancia».
En cuanto a los trámites que se llevan a cabo para la certificación del aeropuerto, Fabra ha dicho que la ministra de Fomento, Ana Pastor, en su reciente visita a Castellón estuvo «muy cariñosa» y le dijo que «por supuesto» que «tenía todo su apoyo».
En este sentido, una de las condiciones del acuerdo que figura en la oferta presentada, según Fabra, es que «la Generalitat y el Gobierno prestarán todo el apoyo para que las gestiones se hagan lo más rápido posible», y otra la obtención de la «carta bancaria de garantía para la inversión».