¿Entendéis ahora porqué está tan desacreditada la política? Por individuos de esta calaña. Reune todas las características que se atribuyen a quien utiliza la función pública para medrar. Su verbo es soez y grosero. Lleno de animadversión hacia todo lo que le es ajeno a sus intereses partidistas: lo de la función pública al servicio del ciudadano a este “bebedor de tintorro avinagrado” le parece una memez. Sólo por los comentarios que en su día hizo de Marina D’or (Marina horror y demás gracietas impropias del cargo que ocupa) debería haber sido relevado del cargo. Claro que, así como para cualquier cargo de responsabilidad se requiere una formación específica y un cerebro bien amueblado (y equilibrado), en política prevalece la ruindad y la villanía por encima de los valores éticos y profesionales y así nos va…. Es usted un impresentable y un desagradecido y olvida con suma facilidad que está desairando a quienes le damos de comer con sus arbitrarias y prevaricadas decisiones. Que le aproveche.

¡¡¡Va usted a la mierda, señor Gil!!!.

Postdata: hemos perdido una batalla, no la guerra. Vamos por el buen camino.

Gracias a todos los que contribuis a la mejora de Marina D’or con vuestros comentarios de ánimo y, sobre todo, a los fundadores de la plataforma por el frenético trabajo que están realizando.

Buenos días.